Otra vez han vuelto a celebrarse las Jornadas por la Unidad Católica de España en Zaragoza, jornadas que principiaron en Toledo en 1989 con motivo del XIV Centenario del III Concilio toledano en el que se convirtió Recaredo con sus nobles visigodos, abjurando de su arrianismo.
Las Jornadas se interrumpieron dos años por causa de la pandemia y se reanudaron el año pasado. Este 2023 han sido las trigésimo segundas. Con notables ausencias como Alberto Ruiz de Galarreta, José Fernando Silva, Francisco Roig y José Luis Díez, que gozan ya de una vida mejor en la Eternidad. Y otras ausencias por la distancia, la edad y la salud como nuestro Padre José Ignacio Dallo, el activo y veteranísimo Gil de la Pisa, el gran animador Agustín Cebrián y el amigo entrañable Vidal Mayor.
El tema elegido fue "El Relativismo en el siglo XXI". Tras la entrada de banderas y el canto del "Christus vincit" la primera ponencia corrió a cargo de José María Permuy, que disertó sobre "El Relativismo, cáncer de la política". Con el rigor que le caracteriza expuso la situación actual del mundo político que afecta a nuestras vidas y supone un giro radical en los modos de vida.
Los jornadistas no sólo escucharon, sino que participaron con preguntas y aportaciones después de cada exposición.
Pablo Gasco fue coordinador de las Jornadas, junto a Jaime Serrano, Presidente de las mismas.
Otra de las ponencias fue sobre "El Relativismo en la enseñanza de la Historia".
La comida fue en el mismo hotel del alojamiento, en La Puebla de Alfindén, sitio magnífico y muy recomendable.Por la tarde, Jaime Serrano habló sobre "Relativismo y Revolución Sexual", con atención sobre los nuevos fenómenos de la ideología de género, transexualismo y ruptura de la moral tradicional. Con un animado coloquio posterior.
La ermita de Nuestra Señora de Alfindén ofrece un espacio amplio y tranquilo, donde se puede aparcar en el exterior y próxima al hotel. Favorece la atención y el recogimiento.
Carmina dirigió el rezo del Santo Rosario, como viene haciendo en las sucesivas Jornadas.
El Padre Francisco Suárez y el Padre José Miguel Cañamás concelebraron la Santa Misa.
José Luis Corral hizo la Primera Lectura y el Salmo Responsorial.
Durante la Consagración, la Bandera se inclina como signo de Adoración ante Dios mismo.
Por último, la Exposición y Bendición con el Santísimo Sacramento, por el Padre Cañamás.
Durante la cena tuvimos la visita atenta y considerada del joven párroco de La Puebla, muy de agradecer. En la foto, conversando con el Padre Suárez.
El domingo principió temprano con la Misa de San Pío V, según el misal de Juan XXIII.
Como recomendó el Concilio, las lecturas se hicieron en lengua vernácula, el castellano aquí, claro.
Después, las conclusiones de las Jornadas, preparadas por Jesús Ortiz. Iban a ser 17, pero se añadieron dos más por las intervenciones de los jornadistas.
Pilar Frigola alertó de las doctrinas perniciosas que llegan a todos en general y a los niños en particular por los medios de comunicación y hasta por los libros de texto y los comentarios de los educadores, por lo que es menester andar muy alertas y dialogar mucho con los hijos.
Mari Luz Román, por su parte, nos animó a hacer nuestro apostolado por las redes sociales y por todos los medios a nuestro alcance.
La publicidad es una constante de nuestras asociaciones, sobre todo con el ejemplo ininterrumpido por más de 40 años del "Siempre p'alante", ahora retitulado como "Unidad Católica de España", una fuente permanente de información, formación e invitación a la acción. Él ha sido el convocante de las Jornadas desde su comienzo, donde se han concitado diversas agrupaciones católicas como las Uniones Seglares, "Gerona Inmortal", el Movimiento Católico Español, Misioneras Rurales y otras entidades, además de la militancia personal en otras organizaciones, particularmente la Adoración Nocturna y las 40 Horas.Todos puestos en pie para proceder a la renovación del Juramento en defensa de la Unidad Católica de España, la que vivió y gozó nuestra Patria desde 589 a 1978.
En nombre de todos, renueva el Juramento, de rodillas, ante la autoridad eclesiástica, ante el Crucifijo, el Altar y la Bandera, el Presidente, Jaime Serrano de Quintana. Luego lo fueron haciendo todos los participantes, besando con un unción la enseña nacional sellada con el Sagrado Corazón de Jesús en su centro.
Algunos de los participantes posan ante la ermita, justo delante de una imagen del Sagrado Corazón de Jesús que apenas se adivina, semioculta por el follaje.
No podía faltar la visita a la Virgen del Pilar, con las colas habituales para besar la columna sobre la que se mostró la Señora a Santiago Apóstol.
Para realizar la clásica foto, la que encabeza esta crónica.
Hubo quienes aprovecharon para entrar en la Seo y volver a oír Misa, bajo las impresionantes arcadas del gótico aragonés, revestido de un barroco sublime. Con peregrinos de Lugo y la coral de Azuqueca de Henares.
Y a prolongar las horas de hermandad, buen humor, canciones y reencuentro en un hotel próximo y céntrico, con ganas de repetir.
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