Discurso de José Luis Corral en el Arco de la Victoria

 

Extracto del discurso pronunciado por José Luis Corral, Jefe Nacional del Movimiento Católico Español y de Acción Juvenil Española, el 17 de Julio de 2022 en el Arco de la Victoria, conmemorando el Octogésimo sexto Aniversario del Glorioso Alzamiento Nacional del 18 de Julio de 1936:

Compatriotas, camaradas y hermanos:

Otro año más conmemoramos un hecho crucial de nuestra Historia, la rebelión contra el Estado de anarquía y violencia que amenazaban con destruir a España y la Fe Católica. Porque eso es lo que se proponen aquellos comunistas, socialistas y separatistas del Frente Popular que hoy en día vuelve a dirigir los destinos de España hacia el desastre. El partido más mentiroso, corrupto, criminal y ladrón de la historia de España no tiene empacho en volver a aquellos tiempos para dar la vuelta a la Historia.

Como un 2 de mayo de 1808, como un año 718 en Covadonga, España se resistió a morir el 18 de julio de 1936 y se alzó en armas contra la tiranía, cosa de todo punto legítima en circunstancias tan extremas y dramáticas, cuando las iglesias eran quemadas, la gente era asesinada por las calles y se llegaba a detener y asesinar al jefe de la oposición, Calvo Sotelo, cuya tumba visitábamos hace unos días y cuyo magnicidio fue el detonante de aquella guerra que lo fue porque el Alzamiento no triunfó en todas partes.

Ahora, cuando el totalitarismo se quita las caretas y pretende ilegalizarnos, prohibirnos, encausarnos y acabar con nosotros a la vez que ha confinado, amordazado, requetevacunado y coaccionado a todos los españoles, cerrando iglesias y empresas, prohibiendo incluso caminar por espacios abiertos, la situación se percibe con los mismos tintes negros que en 1936.

Pero hoy como ayer sabemos que hay un Dios Todopoderoso, un Cristo Rey que nos dirige y que nos volverá a dar la victoria como en los mejores tiempos de nuestra Historia, aun en desventaja física, aun en contra de todos los poderes. Porque Dios no exige cantidades, sino calidad, ejemplo y fidelidad, la pureza de intenciones y la entrega sin dobleces a su causa. Con esa seguridad, celebramos que vencimos y anunciamos que volveremos a vencer. 

Nos sabemos instrumentos de la Divina Providencia, decimos lo que tenemos que decir y hacemos lo que tenemos que hacer. Damos culto al Bien, a la Verdad y a la Justicia. No tenemos miedo. Nuestros ideales son tan puros como esta bandera, la más bonita del mundo, con el escudo más bello del mundo, que dan razón de la Nación más hermosa y más gloriosa del orbe terráqueo: España. Como los himnos patrios, los himnos de la Cruzada que vamos a cantar a continuación.

¡¡¡ ARRIBA ESPAÑA !!!

¡¡¡ VIVA CRISTO REY !!!