20 N con cambios en la Plaza de Oriente.

Otro 20-N. Y otro año más, en la Plaza de Oriente, como siempre que no lo han impedido las obras municipales.
El mismo marco, el mismo formato con la adicción de una manifestación que se hace últimamente desde Callao hasta la delantera del Palacio de la Ópera. Las mismas gentes, con un espectro muy amplio de edades, desde adolescentes hasta venerables ancianos, como la vida misma, que va muriendo y se va renovando sin cesar. El mismo colorido, el mismo patriotismo. Pero con algunos cambios importantes para el ojo avezado, que comentaremos más adelante.

La manifestación partió de Callao con una pancarta de La Falange, con Jesús Muñoz, Gonzalo Martín, Roberto Fiore, Yván Benedetti, Manuel Andrino y Félix Salmerón.

 La Asociación Patriótica de Santander también participó en la marcha, lo mismo que Aes, que en la foto está al lado, pero su pancarta no se ve entera en la foto.

 Y otra pancarta bien significativa.

También iba el popular Holandés Franquista, Tom. Él sólo y por sí mismo es toda una pancarta.

La manifestación desembocó en la Plaza de Oriente, delante del Teatro de la Ópera (a unos 200 € la entrada para las funciones de Ópera Lírica).

 Fuerte presencia policial, pues quizá esperaban lo que iba a suceder.

Y no fue otra cosa que las activistas pagadas de Femen, que volvieron a exhibir su grosero cuerpo y su infamia pintada en letreros, sin que las feministas se escandalicen de este uso grotesco del cuerpo de la mujer. Lo que sí consiguieron estas cuatro esbirras de Soros y del mundialismo fue que el acto se viera reflejado en los medios de comunicación.

 Por su parte, el Movimiento Católico Español y Acción Juvenil Española montaron su puesto de información y propaganda desde primera hora.

 La clientela fue apareciendo y también los turistas, que  quisieron llevarse algunos recuerdos de España.

 Como novedad de este año, los polos y camisetas de MCE-AJE, que han tenido mucha aceptación. Ni que decir tiene, los calendarios y la lotería nacional con los números del Día de la Victoria y del Glorioso Alzamiento Nacional, 1.439 y 18.736.

El acto, presentado por Begoña del Arco, sin más preámbulos, dio paso a los oradores. Primero intervino Fernando Maqueda, Jefe de las Juventudes de Falange. Un discurso sereno, fluido, sin leer, muy natural y valiente. Si nos van a perseguir por decir lo que pensamos, aquí estoy yo, porque me siento muy orgulloso de defender los mismos ideales que defendió mi abuelo.

El italiano Roberto Fiore, líder de Forza Nuova, en perfecto castellano, con muchas tablas, ideas claras y sabiduría al exponer, se refirió al común combate que se vive en toda Europa, pues todas las naciones se ven compelidas a establecer políticas antinatalistas y aprobar el aborto, favorecer la inmigración masiva y descontrolada, verdadera invasión; perjudicar a los trabajadores y residentes nacionales y destruir y dividir las naciones. Y aquellos que se oponen, como en Hungría, Polonia y otros, los mundialistas europeos los quieren aplastar. Pero debemos tener esperanza, porque hay un despertar patriótico en todas partes y mucha juventud que se da cuenta de la amenaza, y un mayor concierto entre las fuerzas patrióticas del Continente.
También recordó a los 50.000 italianos que combatieron en España en la Cruzada.

El abogado Félix Salmerón dijo que nunca había sido franquista, pero que tenía que reconocer la inmensa obra social del Régimen de Franco, llevada a cabo precisamente por falangistas como José Luis de Arrese y José Antonio Girón de Velasco.
Por el contrario, los partidos del actual sistema no han hecho sino despojar a los trabajadores de buena parte de sus derechos adquiridos.

Jesús Muñoz cerró el turno de oradores. Voz clara y argumentos contundentes, denunció las tropelías del sistema, desde la profanación de la tumba de Franco hasta la impunidad de los separatistas y de los terroristas de extrema izquierda, que son benignamente tratados mientras se ejecutan sentencias feroces contra jóvenes como Josué Estébanez, por defenderse de un centenar de esos energúmenos.
Particularmente duro estuvo con Vox, a quien acusó de falsificar los verdaderos ideales y utilizar frases de líderes falangistas sin citar su origen para ganarse al pueblo.
Animó a la juventud a organizarse y luchar.

La gente escuchó con atención y aplaudió. Algunos se levantaron y se fueron cuando se produjeron críticas a Vox. Jesús Muñoz recordó aquella frase célebre de José Antonio: "Bienvenidos los tiempos difíciles, porque ellos harán la depuración de los cobardes".

El acto terminó con dos himnos, el Himno Nacional primero y el "Cara al sol" para finalizar.

Himno Nacional cantado con la letra de José María Pemán.

Cara al sol.

Nota del Jefe Nacional del Movimiento Católico Español:

Este 20-N se ha producido un cambio cualitativo. La Falange ha decidido, unilateralmente, apropiarse del acto de la Plaza de Oriente, del que estuvo ausente más de 30 años, y al que volvió de la mano del Movimiento Católico Español y del Nudo Patriota Español, que lo rescataron cuando la Confederación Nacional de Combatientes se disolvió por voluntad de su último Presidente, Antonio Vallejo, en el año 2011.

El Movimiento Católico Español ha estado presente en el acto de la Plaza de Oriente desde 1981 y ayudó a organizarlo desde 1994. Desde 2011 tomó la responsabilidad plena, pero siempre en actitud de colaboración y abierto a todos, respetando así la naturaleza común de un acto no partidista, sino patriótico, de afirmación nacional. El acto era de todos y para todos. Sólo se excluía quien quería. Por tal motivo, la coalición "La España en marcha" entera se sumó, con La Falange, Alianza Nacional (ésta con ciertas reticencias) y también Democracia Nacional. También participaba Fuerza Nueva, primero como revista y con un orador designado por Blas Piñar, luego continuó Fuerza Nueva Andalucía.

Cuando "La España en marcha" quedó aparcada o disuelta, también por iniciativa de La Falange, el espíritu de colaboración y entendimiento se mantuvo entre los grupos. El coste de megafonía y sillas se repartía entre las organizaciones. Pero al dejar de funcionar "LEM" y su secretaría, el secretario le dio los contactos de megafonía y sillas a La Falange, que además se encargaba de solicitar el permiso preceptivo a la Delegación del Gobierno.

Además, siempre recibimos con gusto delegaciones extranjeras y en la medida de lo posible se les ha dejado participar.

Esta sana colaboración y este entendimiento entre los grupos era un signo de esperanza y acicate para la lucha común. El 20-N era factor de unidad entre las fuerzas nacionales, como lo fue desde su origen con oradores insignes como Blas Piñar, Raimundo Fernández-Cuesta, José Antonio Girón o Evaristo Casariego. El lugar escogido era la Plaza de Oriente porque en ella se reunía el Caudillo de España con el pueblo español y porque allí se le hizo el Funeral de Estado y se le despidió. Un acto inequívocamente franquista con una liturgia muy clara y específica: Oración, banderas, himnos, apartidismo.

Este año parecía que todo seguiría igual que siempre. El 12 de Octubre hablé con Manuel Andrino en Montjuich y le dije que si todo iba a ser igual que otros años y la fecha mejor el 24 que el 17. Me dijo que sí y quedamos de acuerdo. Pero al llegar este domingo a la Plaza de Oriente me he dirigido a la tribuna y he preguntado a Manuel Andrino por el resto de oradores y me ha dicho que sólo intervendrían tres oradores de La Falange y Roberto Fiore, porque así lo habían determinado ellos. Le dije que eso traería consecuencias y me respondió desabridamente "¿qué consecuencias? que presentéis una candidatura al ayuntamiento como habéis hecho?" Le respondí que no creía que pudiera reprocharme ningún comportamiento desleal hacia ellos y me reconoció que eso era verdad, que mi comportamiento siempre había sido honesto.

Para quien no lo sepa, el Movimiento Católico Español presentó una candidatura a las elecciones municipales en Madrid en mayo de este año. Lo mismo hizo Falange Española de las JONS, como lo hizo también para la Comunidad Autónoma, mientras que una coalición de ese partido con La Falange, Dn y Aes llamada adñ lo hizo al Parlamento Europeo.

Esa coalición se formó con dos de nuestros aliados hasta el momento, La Falange y Democracia Nacional, que no se dignaron informarnos lo más mínimo, ni invitarnos. A pesar de ese evidente menosprecio, asistimos a la presentación y recomendamos votarla en las elecciones de mayo, así como al resto de las candidaturas falangistas, excepto al Ayuntamiento de Madrid, donde teníamos unas propuestas que hacer a los madrileños y donde nuestra presencia era tan testimonial como la de los falangistas. No parece que dos testimonios en vez de uno pudieran molestar. Hacíamos así patente, también, ya que éramos orillados y dejados de lado, que no nos conformábamos con el mal menor cuando podíamos ejercitar el bien posible. Presentarnos era decir que existimos y que somos distintos a otros.

Pero parece ser que ahora eso les parece un agravio, como si tuviéramos la obligación de ser sus satélites y secundarles absolutamente en todo mientras a nosotros se nos margina y menosprecia.

No obstante, nosotros hemos seguido con el mismo espíritu de colaboración y camaradería y hemos asistido a actos netamente falangistas con buena disposición, sin reticencias.

Porque no se trata de un quítate tú para ponerme yo, de un protagonismo personal, sino de defender principios, tradiciones y modos de ser importantes.

Esta actitud de La Falange se ha hecho de notar inmediatamente en el desarrollo del acto;

1.- NO ha habido Oración, ni Bendición, ni nada religioso católico como era propio del acto.

2.- La Bandera de España con el Águila de San Juan no ha presidido el acto, como es obligado, sin que baste a sustituirla su abundante exhibición por parte de los patriotas presentes.

3.- Tampoco ha estado una de las banderas de la Cruzada, la antigua bandera de España, la tradicionalista con las aspas de San Andrés.

4.- Entre los himnos ha faltado el Oriamendi, himno también del Movimiento Nacional y de la Cruzada.

5.- El acto lo ha cerrado el "Cara al sol" en vez del "Himno Nacional", como exige el protocolo más elemental.

6.- El acto ha seguido siendo unitario en las organizaciones que han participado en la manifestación y la concentración, pero la tribuna se ha hecho partidista, por muy buenos y respetables que sean los oradores, que lo son e hicieron uso de una gran oratoria.

7.- Se ha pasado de la POLÍTICA con mayúsculas, grande, elevada de miras, atendiendo a los grandes problemas nacionales, a rebajarla a política pequeña, de partidos, sobre todo por las alusiones a Vox, excesivas e injuriosas para muchos de los que estaban, injustas porque no se puede juzgar equitativamente sin valorar lo bueno y lo malo, temerarias porque se buscan enemigos innecesarios entre los únicos que desde el mundo parlamentario y legal pueden paliar o evitar la gran persecución que se nos avecina con un Gobierno de Frente Popular. Porque dos días antes esos mismos se han opuesto públicamente en votación en la Comunidad de Madrid al traslado y ocultamiento de José Antonio en el Valle de los Caídos. Y Nobleza obliga. Nobleza obliga incluso con el enemigo. Y estos no son el enemigo. Son los listos que nos han levantado a la novia. Y la reacción es de celos, pueril, inmadura.

Vox no es el enemigo, y mucho menos su gente. Claro que no somos como Vox. Evidente. Ellos son sustancialmente liberales y demócratas y nosotros todo lo contrario. Como no teníamos la misma religión que los moros del Ejército Nacional, ni la misma ideología que Adolfo Hítler, ni que las compañías petrolíferas norteamericanas que nos suministraron combustible en la guerra. Pero también hay aliados circunstanciales ante un enemigo común, sobre todo en momentos de máximo peligro, cuando están a punto de aplastarnos.

Pero sólo tenemos que ser como somos, explicar nuestra doctrina, mantener la ética y el estilo, creer de verdad en el tesoro que portamos, en las banderas que ondeamos, en los himnos que cantamos. Sin jugarretas, sin atajos, sin picardías. Nobleza obliga.

Nosotros seguimos tendiendo la mano a la colaboración, con un espíritu de patriotismo y camaradería, pero en pie de igualdad, sin privilegios, pero sin trágalas. Y seguiremos defendiendo los mismos ideales que siempre hemos defendido, solos o acompañados.
Por eso mismo, decidí pronunciar el discurso que llevaba preparado cuando terminó el acto, porque tenía que decir algo importante y en ese lugar. Además de hacer lo que faltaba al rito del 20-N, la Oración y el Oriamendi, con todas las banderas.

José Luis Corral