Una multitud, principalmente de jóvenes, ha seguido con atención los vibrantes y certeros discursos de una mañana soleada y clara que comenzaba en la Plaza de la Coca con el Himno Nacional y terminaba con el Cara al Sol.
La Jornada reivindicativa, de denuncia, memoria y testimonio, terminaba en el pueblo de Labajos, donde cayó el Caudillo de Castilla, Onésimo Redondo, abanderado de la Justicia Social, al pie de la carretera nacional, donde se yergue un monumento que recuerda su ejemplo y su sacrificio.
La pancarta era bien expresiva. Estamos orgullosos de nuestra historia, del yugo y de las flechas, de nuestras banderas y signos, bajo las cuales murieron muchos miles de caídos, que merecen un respeto y un recuerdo.Hizo la presentación Juan Manuel Pozuelo, gran comunicador radiofónico e internáutico, con destreza y con intención.
Abrió el fuego Pablo, joven falangista, que manifestó el resuelto afán de los jóvenes nacionalsindicalistas de hacer frente a todos los desafíos que planteen los enemigos de España, sea en Blanquerna, en el Ateneo, en el hotel que alojaba al pirata Picardo y también en Valladolid, como no podía ser menos cuando se pretende derribar un vestigio de nuestra historia.
Intervino luego Enrique Lemos, por Democracia Nacional, atacando a un alcalde entreguista y cobarde que dice que no puede hacer nada, pero que es el responsable último del derribo.
Pedro Pablo Peña, con la contundencia que le caracteriza, denunció los manejos de un estado dominado por las mafias políticas, que condena a nuestro pueblo a la miseria. Por contra, nuestro mensaje es la unión de lo nacional y de lo social, el nacional-sindicalismo.
No menos contundente fue Manuel Andrino, recordando primero la violencia de las izquierdas que comenzó desde el primer momento en el que se implantó la II República, y criticando que se quiera echar al olvido a las víctimas de aquella República mientras se enaltece y se les dedican monumentos y calles a criminales tan sanguinarios como Carrillo. Arremetió lueego contra la familia real que ha acumulado una inmensa fortuna con el manejo de las comisiones por el comercio internacional de España. De ese nefasto ejemplo han surgido el resto de casos de corrupción. Pero La Falange no callará y defenderá siempre la memoria de nuestros muertos.
El Cara al Sol con el brazo en alto puso fin al acto. En cabeza, los representantes de las fuerzas políticas convocantes.
También estuvo presente Acción Juvenil Española, aunque la gran mayoría de nuestros afiliados no puedan desplazarse.
Pero los más pequeños también hacen sus primeros alardes como abanderados. Y bien que disfrutan.
Buena parte de los desplazados desde Madrid paró a la vuelta para comer en hermandad y camaradería en un restaurante de carretera. Abundaron el buen humor y la alegría.
Como glorioso final, una breve parada en la carretera de La Coruña, en Labajos, ante el Monumento a Onésimo. Las cinco rosas, la Oración de los Caídos de Sánchez Mazas y unas breves palabras de Félix Salmerón para concluir con un rotundo Cara al Sol, para asombro de decenas de turismos y camiones que circulaban muy despacio por ese punto. No pocos saludaron con Arribas a España y toques de claxon.
Los expedicionarios del Movimiento Católico Español y Acción Juvenil Española habían acudido primero a oír Misa en el Santuario Nacional de la Gran Promesa, en Valladolid, donde el Padre Bernardo de Hoyos recibió las apariciones del Sagrado Corazón de Jesús, que le dijo en 1733: "Reinaré en España y con más veneración que en otras muchas partes". Es el origen del Reinado Social de Nuestro Señor Jesucristo y del grito ¡Viva Cristo Rey!En este Santuario está la lista nominal de los 113.178 caídos por Dios y por España durante la Cruzada Nacional de Liberación.
En su Altar Mayor, el retablo culmina en su parte superior izquierda con un magnífico Escudo de España con el Águila de San Juan esculpido. Otro Escudo igual figura pintado en la cúpula a los pies del Divino Redentor. Pueden apreciarse ampliando la foto.
La imagen del Sagrado Corazón de Jesús es de gran tamaño, la más grande que hemos visto en el interior de un templo.
Ya de vuelta, una visita a la iglesia románica de Boadilla del Monte y algo de propaganda patriótica porque no queremos disfrutar de estos grandes momentos en solitario, sino ofrecerlos a todos los españoles de buena voluntad que quieran alistarse en nuestras filas.