533 años después, Granada volvió a celebrar la Toma, el fin de la Reconquista, la Unidad Nacional. Y 36 horas después de que la cada vez más sectaria TVE se burlara del Sagrado Corazón de Jesús en las campanadas de medianoche que anunciaban el cambio de año, nosotros quisimos enarbolar la bandera de España con el Sagrado Corazón de Jesús, frente al balcón donde se tremola por tres veces el pendón de los Reyes Católicos con el Águila de San Juan.
Además, la bandera sirve para reencontrarnos los viejos camaradas, dispersos entre los miles de granadinos que abarrotaron la plaza del Ayuntamiento y el paseo de los Reyes Católicos. Y algunos pudimos prolongar la jornada tomando refrescos y aperitivos en uno de los mejores establecimientos de la ciudad.
La Legión, espectacular, muy aplaudida.
La banda, espléndida. "Granada, tierra ensangrentada en tarde de toros..."
También hubo tiempo para visitar al Señor en uno de los hermosos templos de Granada.
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