Un año más, se ha recordado a los Mártires y Caídos del Túnel de la Muerte, en Usera, en noviembre de 1937. Gente de buena posición, algunos banqueros y aristócratas, refugiados en embajadas extranjeras durante la dominación roja de Madrid, que fueron engañados con la promesa de pasar a zona nacional por un túnel, siempre y cuando entregaran importantes cantidades de dinero, valores y/o joyas, a los que les conducirían, supuestamente para comprar a guardianes rojos. Pero cuando fueron llevados al lugar, un chalet de la zona, en vez de pasarlos, los asesinaron. En el lugar se erigió tras la guerra un colegio y convento de religiosas teatinas, que siguen guardando las sepulturas.
Tanto la misa como el responso fueron celebrados por el Padre
Daniel Rojo, Capellán del CEU. Asistieron varios religiosos de los
Hermanos del Cordero.
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