XXVIII Jornadas por la Unidad Católica de España

Por el Reinado Social de Nuestro Señor Jesucristo

Examen de los 3 centenarios, 1517, 1717 y 1917. Protestantismo, Masonería y Comunismo.

 Una vez más, se han celebrado en Zaragoza las Jornadas por la Reconquista de la Unidad Católica de España. Desde hace años, acogidos por las Nazarenas, en cuyo salón de actos está tomada la fotografía con parte de los jornadistas asistentes a esta vigésimoctava edición.

Este año las sesiones se han dedicado a glosar los centenarios de acontecimientos de profunda significación para el mundo, como fueron la Reforma Protestante de Lutero, principiada en 1517; la fundación de la Masonería en 1717 y la Revolución Soviética de 1917, sobre las que avisó Nuestra Señora la Virgen María en Fátima en ese mismo año, aspecto relevante que también se ha considerado con atención.

 Del aspecto general de la reunión dan idea estas imágenes del salón tomadas en momentos distintos, con el elegante y práctico escenario, bien decorado con los símbolos más representativos de estas Jornadas.

Y el Padre José Ignacio Dallo, incansable promotor y organizador de las Jornadas desde su atalaya del "Siempre p'alante" y con la ayuda primera de la Unión Seglar San Francisco Javier de Navarra, a la que se unen con entusiasmo otras uniones seglares y asociaciones diversas, además de personas a título individual.

 Tras la entronización de banderas y la salutación del Presidente en funciones, Jaime Serrano, la Misa en el Pilar, a cuya vera se arriman siempre las Jornadas. Concelebraron los sacerdotes jornadistas con el canónigo de oficio y otros presbíteros que dirigían sendas peregrinaciones.

Desde el Altar de la Virgen, don José Ignacio Dallo, dirigiendo los cantos con su magnífica voz y gran entonación. Por cierto, aun siendo un sábado normal, el gentío que había era enorme y se tardó largo rato en repartir la sagrada comunión, pese a repartirla varios sacerdotes, aprovechando el gran reclinatorio que cierra el altar. Mientras, esperaban docenas de familias para presentar a sus niños pequeños a la Santísima Virgen del Pilar. Al día siguiente era la Divina Misericordia. Por tanto, indulgencia plenaria, que sumada a la visita al Pilar y el Rosario ante el Santísimo de por la tarde, permitieron a los jornadistas ganar 3 indulgencias plenarias, aplicables a los difuntos de su elección. Eso sí, con la necesaria confesión personal en la semana anterior o siguiente. Lo que también se pudo hacer con facilidad porque siempre hay confesores a disposición de los penitentes.

Rogelio González de Oriandaín presentó a Arturo López de Mendoza y Muñoz, que explicó detalladamente los orígenes masónicos desde el Antiguo Testamento hasta nuestros días, las diferentes clases de masonería y su organización.

Después vino una reparadora comida, también servida por las Nazarenas, que han hecho un servicio impagable a los jornadistas, facilitanto la logística del evento con su salón, la iglesia, el comedor y las habitaciones.

Carlos González se refirió a las fechas de referencia para glosar su pasado y su actualidad.

El historiador Fernando López del Amo explicó la contraposición entre el materialismo dialéctico del marxismo y el cristianismo, que después se ha querido salvar con fórmulas como la Teología de la Liberación.

 También fue posible adquirir libros de gran interés, que no pueden encontrarse fácilmente en las librerías normales. Y en muchos casos a muy buen precio, pues son ediciones antiguas ya descatalogadas.

También el folleto encuentra un lugar insustituible en la propaganda católica, con la revista, la hoja, la estampa.

 Y lo que es más importante, la adoración y la oración, que son como la sangre que fluye por nuestro cuerpo. Exposición, rezo del Santo Rosario y Bendición con el Santísimo, entre viejos himnos y canciones cristianos, que conmueven el alma y elevan el espíritu.

Y la predicación siempre profunda, acertada, viva y elocuente del Padre Francisco Suárez, al que muchos se acercan para pedir consejo y plantear dudas teológicas y pastorales.

Y la cena, que también hay que alimentar al cuerpo. Aquí, la familia Ortiz, que al día siguiente deleitó a los jornadistas con unas cuentas canciones.

 Y la Santa Misa del Juramento, el domingo, tras la oración matutina, en San Juan de los Panetes, bello templo renacentista, pero desolado por las destrucciones que padeció en su historia, con los franceses y con la II República.

 Presidió y predicó Don Fernando Mendoza, canónigo del Pilar, concelebrando con los Padres Dallo y Suárez.

Jaime Serrano renovó el Juramento de defender la Unidad Católica de España en nombre de todos.

En la Consagración, las banderas se rinden ante Su Divina Majestad, Cristo Rey, que se hace presente en las especies eucarísticas.

Vista general del templo durante la comunión, que fue posible realizarla de rodillas y en la boca por la instalación de reclinatorios.

 José Luis Corral, Jefe Nacional del Movimiento Católico Español y de Acción Juvenil Española, presentó a José María Permuy, un militantes comprometido desde muy joven, sobre todo en las organizaciones falangistas, y de sólida formación, acreditado pensador, orador y publicista.

José María Permuy Rey disertó sobre Nuestra Contrarreforma Católica, haciendo un repaso de la Cristiandad y de los ideales que debemos preservar, que valen tanto para España como para el resto de naciones cristianas.

Desde Valencia llegó una interesantísima exposición de gran calado espiritual y sobrenatural.

También intervino Luis Blanco, hijo de nuestro inolvidable amigo Emilio Blanco, fallecido el 20 de Noviembre, Día de Cristo Rey. Contó sus últimos días y agradeció la solicitud y amistad mostrada por tantos amigos españoles, pues ellos residen en Francia.

 Narcís Juanola, Catedrático de Filosofía, intervino para explicar que no se puede descomponer la unidad porque se llega al absurdo, al átomo y a la nada. Por eso, defender la Unidad de España es obligado, justo y necesario.

 Antonio Gorrita, destacado en la misma lucha por la hispanidad de Cataluña y la unidad de España, contó algunas de sus vivencias desde su compromiso con Somatemps.

 También estuvo Isabel, de "María Mensajera", revista muy popular y extendida, que sigue con su encomiable labor espiritual y apostólica.

Entre los jóvenes, intervino Guillermo Zubiri para animar al compromiso y la acción.

Para terminar, Jaime Serrano, Presidente en funciones por ausencia de Alberto Ruiz de Galarreta, leyó las conclusiones de las Jornadas, que fueron aprobadas por unanimidad. En la foto, entre José Luis Díez y el Padre Dallo. Después, el canto del "Juventudes Católicas de España" y la foto de familia final.

 No podemos dejar de reseñar la presencia de Gil de la Pisa Antolín, que hubo de volverse el sábado por la noche por razones familiares y de salud, pero que no quiso dejar de asistir.

Y Fernando Rivero, de la Adoración Nocturna, otra baluarte de las Jornadas, haciendo una labor callada pero muy eficaz.