XXX Jornadas por la Unidad Católica

 Las Jornadas por la Unidad Católica han llegado a su Trigésima Edición, 28 de las cuales se han celebrado en Zaragoza, a la vera del Pilar. En la foto, algunos de los participantes posan en la foto final de familia. Bajo el tema general del "Centenario de la Consagración de España al Sagrado Corazón de Jesús", los jornalistas han estrenado nueva residencia, teniendo la fortuna de hacerlo en el Colegio Cristo Rey, de los Padres Escolapios, construido en las afueras de la ciudad, cerca de la Academia General Militar, en 1964, un año antes de que se rehiciera el monumento al Sagrado Corazón del Cerro de los Ángeles, con renovación de la Consagración por el Generalísimo Franco, en aquella España de un febril desarrollo, del Estado de obras, del crecimiento continuo, de la prosperidad, de la paz y el orden, donde Cristo era verdaderamente el Rey.

 Tras la inauguración, el primer paso fue acudir en peregrinación a la Basílica de Nuestra Señora del Pilar, a su camerino, donde está situada la columna que según piadosa tradición es la misma columna a la que fue atado Nuestro Señor Jesucristo para ser flagelado en el Pretorio, en el transcurso de su Pasión. La Santa Misa fue concelebrada por tres sacerdotes, entre ellos el Rv.P. Don José Ignacio Dallo Larequi, incansable promotor de estas Jornadas, Director del "Siempre p'alante" y de la Unión Seglar San Francisco Javier de Pamplona.

 En el Altar del Pilar se sigue celebrando la Santa Misa de espaldas, pues la especial protección de que goza este insigne monumento prohíbe cualquier transformación al gusto del modernismo rampante y actuante.

Hay también un hermoso comulgatorio, que permite a los fieles comulgar devotamente de rodillas.

 El Padre Dallo repartió también la Sagrada Hostia en un clima de piedad muy edificante.

 Por allí siguen las bombas que los aviones rojos tiraron sobre el templo en agosto de 1936 y que milagrosamente no llegaron a estallar.

 También sigue la tumba del Cardenal Soldevila, vilmente asesinado por los anarquistas, uno de ellos el famoso líder Ascaso, del mismo grupo de Durruti, ambos asesinos sanguinarios que pagarían sus crímenes con sus propias vidas al comienzo del Glorioso Alzamiento Nacional de 1936. El asesinato del Cardenal en junio de 1923 fue uno de los acontecimientos que precipitó la Dictadura del General Primo de Rivera, que puso fin al bandolerismo, a la guerra del Rif en Marruecos y proporcionó 6 años de prosperidad a España.

José Luis Corral, Jefe Nacional del Movimiento Católico Español y de Acción Juvenil Española, encabezó la delegación de ambos movimientos.

 A continuación tuvo lugar la primera de las conferencias en el salón de actos del Colegio Cristo Rey.

Javier de Miguel Marqués disertó sobre "Consagrados al Corazón de Cristo desde la Conversión de Recaredo en el 589". Magnífica exposición histórica, a la par que teológica, filosófica y piadosa de este joven Licenciado en Ciencias Económicas.

 Vino luego el reparador almuerzo, en el comedor de alumnos del Colegio, donde puede verse al conferenciante junto a su colega y correligionario Daniel Marín Arribas, autor del libro "Destapando el liberalismo".

La tarde comenzó con la exposición de J.F.G. Arizcún sobre "XXX Jornadas desde el XIV Centenario en toledo, en 1989". Nadie se echó la siesta, desde luego. Una dramática relación de hechos, de derrotas y claudicaciones en estos 30 años, a las que nos hemos opuesto obstinadamente, reciamente, sin claudicar jamás, sin caer en el desaliento ni la traición. Tiempos de apostasía, de cobardía, de obscuridad.

 Intervino también Pilar Gutiérrez, líder del Movimiento por España, llamando a la acción y al compromiso ante los graves momentos que vive España.

Muy distinta fue la conferencia de Carmina Sancho Sempere, Licenciada en Derecho, en un tono más intimista, dulce y femenino, como se corresponde con su personalidad, aunque sostenga los mismos principios que el orador anterior. Ella hizo un recorrido por la Historia interna de las Jornadas en estos 30 años desde aquella primera celebración en Toledo, en el Alcázar y en la cripta donde yacen Moscardó y los defensores, la procesión de antorchas, San Juan de los Reyes. "Perseverando en el compromiso de la Unidad Católica" fue el título de su trabajo.

José Luis Díez, Director de Radio Unidad Católica, preparó un magnífico documental sobre el Cerro de los Ángeles y sus vicisitudes en el último siglo, la Consagración de 1919, las amenazas de la masonería, la persecución cuando la II República, el asesinato de los cinco jóvenes adoradores que hacían guardia en el Cerro, el fusilamiento y voladura del antiguo monumento, la recuperada devoción y la erección del nuevo y más grandioso monumento, con la renovación del Generalísimo Franco en 1965, cuya fórmula de Consagración fue leída íntegramente.

La Jornada sabatina terminó con la Exposición del Santísimo Sacramento, rezo del Santo Rosario, predicación del Rv. P. Francisco Suárez, Bendición y Alabanzas al Santísimo.

 El domingo comenzó con el desayuno y la meditación. Luego la Santa Misa, concelebrada por los Padres Dallo y Suárez. Predicó Don José Ignacio, inflamado de fervor.

 Tras el Credo, el Juramento de la Unidad Católica, que por ausencia del Presidente de la Junta por la Reconquista de la Unidad Católica, Don Alberto Ruiz de Galarreta, pronunció el Presidente en funciones, Don Jaime Serrano de Quintana.

 La Capilla se quedó pequeña, pero si cabe el recogimiento fue mayor aún. Se cantó la Misa "De Ángelis" en latín.

Ya en el salón de actos, José Luis Corral, Jefe Nacional del MCE y AJE, anunció a todos que estaremos en el Cerro de los Ángeles el 30 de mayo, aniversario exacto del centenario de la Consagración, aunque no hay ningún acto oficial previsto. Y también el 30 de junio, cuando tendrá lugar la renovación oficial, hecha por los obispos de España. Para asistir es necesario inscribirse y como estará cerrado el acceso a los vehículos, el Movimiento Católico Español organizará un bus para que puedan llegar a la cima los peregrinos que lo deseen, partiendo de Madrid ese domingo a las 8 de la mañana, pues la Misa comenzará a las 10.
Asimismo, el 18 de Julio volveremos al Valle de los Caídos, con motivo del Aniversario del Glorioso Alzamiento Nacional, oyendo la Santa Misa y comiendo luego en la Hospedería.
Este año, los calendarios típicos editados tienen ambos monumentos como motivo principal.

Y el Padre Dallo, organizando y dando instrucciones, animando y sosteniendo el ritmo, incansable, inconfundible con su sotana y su porte de cura de la vieja escuela, de la que quedan pocos.

Le tocó luego a Pablo Gasco de la Rocha, abogado y escritor, presentado por Agustín Cebrián, otro veterano asistente.

Desarrolló el tema "Horizonte y Estrategia de Reconquista", que le había correspondido a Juan Pérez del Castillo, que no pudo estar.
Fue un riguroso análisis de cómo hay que proceder para revitalizar nuestras fuerzas y organizaciones y cómo recuperar terreno en esta lucha, en la que contamos con el auxilio de todo un Dios Omnipotente.

La última sesión, con el resumen de las propuestas y conclusiones de estas Jornadas, corrió a cargo del Presidente en funciones, Jaime Serrano de Quintana, acompañado de Jesús Ortiz, ambos de "Gerona Inmortal". Las mismas serán publicadas en el órgano oficial de las Jornadas y de la Reconquista de la Unidad Católica, el quincenal navarro "Siempre p'alante".
Tras el Christus vincit, el Himno a la Virgen del Pilar, el Himno de las Juventudes Católicas de España y los gritos de rigor, se dieron por clausuradas las Jornadas, aunque después se prolongó el buen momento con la comida de hermandad y algunas intervenciones cantadas. Unas Jornadas inolvidables, una especie de Monte Tabor de Transfiguración durante un fin de semana.